A cuatro días para el Clásico, se confirma la ausencia de Ferland Mendy, que estará entre diez días y dos semanas de baja por una lesión en el abductor de su pierna izquierda. Esto deja la puerta abierta a Nacho Fernández, el hombre multiusos de Carlo Ancelotti, que a buen seguro ocupará el lateral izquierdo blanco frente al eterno rival para poder mantener la habitual pareja de centrales de Alaba y Militao.

El canterano blanco ha disputado un total de 29 partidos esta temporada, divididos en 19 encuentros de Liga, 5 de Champions League, 3 de Copa del Rey y 2 de Supercopa. Alejado de los focos de otros jugadores mediáticos, Nacho siempre asegura un buen rendimiento en su posición, sea cualquiera de los dos laterales o el centro de la zaga.

Objetivo: frenar a Adama Traoré

El reto que tiene por delante Nacho este domingo no es menor. A buen seguro será Adama Traoré, su pareja de baile durante los 90 minutos en el Bernabéu, aunque seguramente Dembelé también le pondrá a prueba en la segunda parte. Aquí puede estar una de las claves de este duelo liguero, ya que el Barcelona acostumbra a llevar mucho peligro por la banda de Adama, aprovechando su potencia física y su desborde.

Para Carlo Ancelotti, la confianza en Nacho es absoluta, que siempre rinde durante sus encuentros con la camiseta blanca a un buen nivel, aunque no sea uno de los hombres más codiciados de los blancos. Este domingo tendrá una nueva oportunidad de demostrar su rigor táctico y su sacrificio en defensa en un partido que podría determinar la temporada. De ganar, el Real Madrid le sacaría 18 puntos al Barcelona, además de ganarle el golaveraje particular, lo que descartaría prácticamente al equipo de Xavi y dejaría como único rival por el título al Sevilla de Julen Lopetegui.