La jornada 32 de LaLiga SmartBank presentaba uno de los duelos más importantes de esta segunda vuelta entre Girona FC y UD Ibiza. El conjunto catalán llegaba al partido en un estado de forma pletórico después de cosechar dos victorias consecutivas en sus dos últimos encuentros. Sin embargo, los pitiusos lo afrontaban como una oportunidad para escalar posiciones en la clasificación, después de lograr una notable mejoría en el juego impulsada, sobre todo, por la llegada de Paco Jémez.
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Cambios en el esquema
Ramon Terrats se sumaba a las bajas de Ibrahima Kebe y Valery, tras dar positivo en COVID-19 horas antes del encuentro. Este contratiempo obligó a Míchel a modificar el esquema táctico, cambiando la formación a una 4-3-3 con Pol Lazano como pivote defensivo y Nahuel Bustos en la punta de ataque, en vez de la 3-5-2 que tantos frutos le ha dado.
Paco Jémez, por su parte, también hizo cambios significativos en su once habitual, dando paso a jugadores como David Goldar, Sergio Castel o Miki Villar.
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Primer tiempo demoledor
El Girona empezaba el partido inquieto, adaptándose en un primer momento al juego de los visitantes, pero eso duraría poco tiempo. La primera jugada de peligro llegaría de los pies de Alex Baena que, tras un centro lateral de Jairo, recogía un rechace y engatillaba dentro del área. Germán Parreño conseguía blocar el disparo en dos tiempos y mantenía la calma en el cuadro balear.
Minutos más tarde, el andaluz sería el encargado de asistir a Nahuel Bustos para el primer tanto del partido, en un contraataque distribuido a la perfección por Samu Sáiz.
La más clara de los visitantes la tendría Cristian Herrera, uno de los más participativos en la primera parte, en el minuto 26 con un disparo dentro del área que se iba por encima del travesaño.
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Expulsión de Míchel
El partido pronto sufriría su primer contratiempo con la expulsión de Míchel. El técnico del conjunto local, según Galech Apeztegui, fue expulsado del terreno de juego por protestar de manera ostensible y fuera de su área técnica.
Por otro lado, los visitantes también se chocaron con la lesión de Juan Ibiza, líder de la zaga blanquiazul, que forzó a Paco Jémez a mover algunas piezas. Este cambio, por desgracia, no tendría mucho efecto en el partido, puesto que los catalanes fueron una apisonadora constante durante los noventa minutos.
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Sentencia antes del descanso
El primer saque de esquina de los locales se convirtió en el segundo gol de la noche, un centro servido por Aleix García que remataba Bernardo Espinosa, pero que finalmente Germán Parreño introducía dentro de su propia meta.
Juan Carlos también quería protagonismo y aparecería en una de las pocas ocasiones de peligro del club pitiuso con una parada antológica dentro del área a pocos minutos de acabar el primer tiempo. El que sí que acabaría de una forma excepcional los primeros cuarenta y cinco minutos sería Nahuel Bustos que, con una vaselina impecable, conseguía poner el 3-0 en el marcador y el doblete en su bolsillo, tras un error garrafal del guardameta visitante en la salida de balón.
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Alex Baena, pieza clave para Míchel
En la segunda mitad, Paco Jémez incorporaba a Javi Lara y Álvaro Jiménez con la intención de remontar un partido que solo podía ir cuesta abajo para los baleares. Cristian Herrera empezaba los segundos cuarenta y cinco minutos con un tiro muy peligroso que Juan Carlos conseguía desviar a saque de esquina. La UD Ibiza intentaba la presión alta para evitar las combinaciones de los locales, pero consiguieron justo lo contrario.
Cuando los buenos se juntan, siempre pasan cosas, y claro ejemplo de ello fue el cuarto tanto del encuentro. Borja García bajaba a recibir, controlaba hasta llegar a la media luna y este cedía para Alex Baena que recortaba y con la zurda ajustaba al palo derecho del portero. Una vez más, el jugador cedido por el Villarreal volvió a demostrar por qué el seleccionador español sub-21 ha contado con él para los próximos partidos y la importancia que tiene dentro de la plantilla gerundense.
En el minuto 62 llegaría el gol del honor para la UD Ibiza, por parte de David Goldar, con un cabezazo soberbio inalcanzable para Juan Carlos que le daba un poco de vida al conjunto visitante.
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Gol número 100 de Stuani
La guinda del pastel la iba a poner Christian Stuani desde los once metros con una preciosa 'panenka' que acababa de amargar la noche a Germán Parreño. El uruguayo suma 16 goles y se coloca detrás de Borja Bastón (17) en la guerra por el pichichi. Además, con ese mismo tanto llegaba a la increíble cifra de 100 goles con la zamarra gerundense en sus cinco temporadas como 'gironí'.
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Rival directo
El domingo 27 de marzo, el Girona se enfrentará al Almería en el Estadio Juegos del Mediterráneo a las 21:00 horas de la noche, en el partido correspondiente a la jornada 33.