El Real Madrid visita este próximo miércoles a las 21 horas Stramford Bridge, otra vez sin Carlo Ancelotti. El técnico ya no pudo viajar a Balaídos tras dar positivo en Covid-19, y en el encuentro de cuartos de UCL, tampoco estará en el banquillo, que queda en manos de su hijo. 

La estrategia

Carletto dejará la estrategia marcada desde casa, aunque en función del partido, las decisiones quedarán en manos de Davide. Observando los antecedentes del italiano, lo más probable es que juegue con un 4-3-3

El propio Thibaut Courtois hablaba en rueda de prensa sobre este sistema de juego: "El míster decide, cada jugador puede tener su opinión, puede preguntar a algún jugador para ver su opinión, pero elige el míster. Depende de si quieres presionar más o menos, interesa lo de meter un cuarto medio o no. Es lo que hemos estado trabajando, pero no puedo decir mucho más", destacaba el portero

No se equivoca el belga al señalar que la colocación deberá depender de si Ancelotti quiere optar por un juego más ofensivo o más defensivo. Más allá de poner tres o cuatro centrocampistas, la cuestión recae sobre quienes serán los titulares. Modric parece indispensable en el equipo, pero en los últimos partidos, Kroos y Casemiro no están dando la talla, especialmente el brasileño. 

Fede Valverde se ha ganado a pulso el puesto; y Camavinga cumple siempre que el técnico le requiere, que es en muy pocas ocasiones. Por ello, quizás lo más correcto sería jugar con Modric- Camavinga- Valverde ante los de Touchel

Viejos conocidos 

En la sala de máquinas, los elegidos se medirán con un viejo conocido del Real Madrid, el ex madridista Mateo Kovacic. Asimismo, Carlos Casemiro guarda muy mal recuerdo de N´Golo Kanté. La pasada temporada, cuando Chelsea y Madrid se vieron las caras en semifinales de UCL, el francés fue claramente superior al brasileño y a todo el centro del campo en general. 

El vestuario desea la revancha

Por otro lado, los vikingos llegan con sed de revancha luego de que los actuales campeones de UCL les eliminasen, todavía con Zidane en el banquillo. 

Los visitantes llegan en un buen momento, con LaLiga prácticamente en el bolsillo. Situación distinta es la que vive el conjunto local, que tras la dimisión de Abramovich no levanta cabeza.