Tras la última jornada de LaLiga, Antoine Griezmann cumplió 200 partidos vistiendo la elástica rojiblanca en la competición, disputando 177 de ellos antes de su breve periplo en el FC Barcelona, club que tiene la propiedad de los derechos del jugador francés y el cual se estaría planteando volver a contar con sus servicios, aunque esto depende plenamente del Atlético de Madrid.

El jugador de 31 años no está gozando de una de las mejores temporadas de su carrera, sumando 8 goles y 5 asistencias en los 33 encuentros disputados, además de haberse perdido un total de 15 partidos, debido a 2 lesiones musculares y al COVID-19. A pesar de ello, Antoine es uno de los baluartes de Simeone en el campo, siendo una pieza fundamental en el desempeño de los rojiblancos a lo largo de la temporada.

Inicio complicado

El francés, tras un final de mercado loco, tanto en Barcelona como Madrid, acabó recalando nuevamente en la disciplina de Diego Pablo Simeone, significando también la partida de Saúl a tierras londinenses, rumbo al Chelsea. El mediapunta nunca escondió su deseo de volver a ser entrenado por el argentino, y ese deseo se cumplió en forma de cesión, que podía ser prorrogable por otro año, según quisiese el Atleti, además de incluir una opción de compra no obligatoria por 40 millones de euros al final de la cesión, siendo esta una magnífica operación en el plano meramente deportivo.

Su llegada suscitó un mar de dudas entre la afición atlética. Hay quien lo veía como el retorno del hijo pródigo, que volvía arrepentido tras traicionar a los suyos, perdonándolo a su llegada. Otros tantos iban a ser y son más duros con él, no disculpándolo por sus actos en su último año como colchonero, tanto por la firma de un precontrato con el Barça antes de la vuelta de Champions ante la Juventus, como por el anuncio de su partida mediante un vídeo en las redes sociales del club.

Foto: Atlético de Madrid
Foto: Atlético de Madrid

En el plano futbolístico, también le costó volverse a adaptar al conjunto de Simeone, pues no vio puerta en sus 5 primeros partidos desde su regreso. A partir de su gol ante el AC Milan, clave para la remontada en aquel día, se fue convirtiendo en una pieza clave en el ataque, demostrando el por qué de su vuelta, sobre todo en la Champions League, realizando una Fase de Grupos más que decente con cuatro goles y una asistencia

Nuevas adversidades

Cuando parecía asentarse en el once titular, Antoine sufrió una dura entrada de Dani Carvajal en el Derbi, que ni siquiera se sancionó con tarjeta, causándole una lesión muscular que le tuvo apartado hasta el estreno copero ante el Rayo Majadahonda, donde anotó un gol y recayó de su lesión

Todo el mundo se echó las manos a la cabeza, pues el francés ha sido uno de los jugadores más constantes en la plantilla de Simeone en estos años, habiéndose perdido un solo encuentro entre 2014 y 2019 con el Atlético de Madrid. De golpe y porrazo, y con dos lesiones musculares de por medio, Antoine se perdió hasta 15 partidos durante la peor racha de la temporada del Atleti.

Foto: Atlético de Madrid
Foto: Atlético de Madrid

Otro de los aspectos del "nuevo" Griezmann es el rol que se le ha asignado en el entramado de Simeone. Debido a la pérdida de velocidad del francés, el retraso en su posición ha sido evidente, actuando como un enlace entre el centro del campo y la delantera, debido al exquisito trato de balón que posee el jugador, además de su excelente visión del juego y de su increíble capacidad defensiva, que le hacen ser un jugador muy útil para el preparador argentino. Esta nueva función ha hecho que se potenciasen jugadores como João Félix, con el que goza de una extraordinaria relación, tanto dentro como fuera del campo, siendo esta dupla uno de los motivos del resurgimiento del Atleti en este tramo de la temporada.

Dudas en la afición

A pesar de todo lo que aporta en el juego de los rojiblancos, tanto en la salida de balón como en el manejo de los ataques, la afición atlética está muy dubitativa sobre si se debería renovar la cesión del francés para la próxima campaña. Uno de los motivos es la preocupante sequía por la que pasa el jugador, que no ve puerta desde el encuentro ante el Rayo Majadahonda del 6 de enero

Nadie pone en duda el compromiso de Griezmann, que lo deja todo en el campo, tanto en ataque como en defensa, y lo a gusto que se siente en el club desde su vuelta, pero eso no sirve si no va acompañado de números. El francés cuenta con la confianza absoluta de Simeone, pues tiene una relación especial con él, tanto dentro como fuera del terreno de juego, y este tramo final de campeonato será fundamental para el argentino, pues será pieza clave para conseguir los objetivos, debido a bajas como las de João Félix o Thomas Lemar.

Foto: Atlético de Madrid
Foto: Atlético de Madrid

Desde el club las intenciones están claras, cuentan con él para la próxima temporada, ya que prolongarán la cesión pactada con el FC Barcelona, y ya juzgarán si al final de la siguiente campaña ejercen la opción de compra no obligatoria de 40 millones que tienen sobre él.