Análisis | Vuelven los fantasmas a Nervión

El Celta de Claudio Giráldez asalta el Sánchez Pizjuán en su primer partido al frente del conjunto vigués, alejándose tres puntos sobre el descenso y reduciendo la distancia con el propio Sevilla, que jugó un mal encuentro. 

Análisis | Vuelven los fantasmas a Nervión
Óscar Mingueza, Isaac Romero y Carles Pérez se disputan el balón durante el partido de ayer | Fuente: Getty Images.
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Por Pablo Sanchez Lopez

No ha sido más que un espejismo. La ilusión ha ganado la batalla a la realidad. El miedo navegaba por los corazones sevillistas allá por el mes de enero, que ya queda demasiado lejos. Sin embargo, la casta y el coraje salió a la luz para volver a generar ganas de ver fútbol en Nervión. Los buenos resultados y la seguridad defensiva acompañaron al Sevilla en febrero, permitiendo alejarse de los puestos de descenso con tranquilidad, con Isaac Romero como pieza clave. 

Pero todo vuelve. Y si el trabajo no es bueno, se dice. Y si el error no está en el césped, también se dice. Al igual que sucedió el pasado lunes en Almería, el Sevilla comenzó el partido jugando a un fútbol muy pobre. Quique confió en el mejor once que tenía disponible, aunque no le fue demasiado bien.

Un Celta muy vistoso, dinámico y con numerosos espacios empezó a cocinar la que fue su victoria. Iago Aspas fue una pesadilla para la zaga hispalense, y Fran Beltrán sostenía a su escuadra. No obstante, la insistencia de la dupla de moda en Sevilla, dio sus frutos cuando En-Nesyri se vio solo ante Guaita. El marroquí vive un momento dulce, y era evidente que la pelota iba a acabar en el fondo de la red. Pero el gol solo permitió la encerrona de los locales, que no aprovechó sus ocasiones en la segunda mitad, y se vio asaltado con dos golazos en seis minutos.

  • Histórico En-Nesyri

El delantero dentro ex del Leganés se convirtió ayer en el quinto máximo goleador del Sevilla en este siglo. Y ya van 67. Puede recibir duras críticas por su irregularidad, pero cuando está bien se nota muy positivamente. Desde que volvió del torneo continental con la selección de Marruecos, ha formado una dupla fenomenal y efectiva junto a Isaac Romero, participando alguno de los dos en todos los goles que ha anotado el equipo desde entonces. 

Tiene un físico estelar, siendo de los jugadores que más kilómetros corre en cada partido, ganando todos los duelos aéreos y presionando cada pelota. Además, ayuda en defensa cubriendo zonas vacías y despejando con cabezazos los saques de esquina. Posiblemente fuera el mejor del Sevilla ante el Celta, marcando un gol de killer de área, robando y encarando a Guaita batiéndolo con facilidad. Hasta que llegó la bomba. 

Youssef En-Nesyri celebra su gol ante el Celta de Vigo | Fuente: Getty Images.
Youssef En-Nesyri celebra su gol ante el Celta de Vigo | Fuente: Getty Images.
  • Por poco llegan a las manos

Quique Sánchez Flores volvió a generar descontento en la afición hispalense. Después del pinchazo ante el Almería, el equipo capitaneado por Jesús Navas no ha mejorado y continua con la mala dinámica en este mes de marzo. A pesar de haber tenido una semana de preparación, el planteamiento del entrenador madrileño no fue el acertado. Lucas Ocampos bastante perdido, Óliver Torres restó más que sumó, y arriba no se materializaron las ocasiones, al igual que mataron a la defensa con dos goles totalmente inesperados. 

Pero lo peor fueron las sustituciones que planteó Quique. Que el primer cambio fuera el que marcó el gol y el que más ocasiones estaba generando pilló por sorpresa a todo el estadio, y digamos que a Youssef tampoco le sentó muy bien. Salió pataleando todo lo que veía por delante, neveras, mochilas... El míster se lo recriminó, aunque prefirió solucionar las cosas de puertas para adentro. Ocampos, que también fue sustituido, tuvo que intervenir para evitar que el desajuste de opiniones fuera más.

Quique Sánchez Flores pidiendo explicaciones a sus jugadores | Fuente: Getty Images
Quique Sánchez Flores pidiendo explicaciones a sus jugadores | Fuente: Getty Images
  • Iago Aspas, líder de orquesta

Qué equivocado estaba Rafa Benítez dejando a su capitán en el banquillo. El de Moaña siempre ha estado para el club de su vida, salvándolo en los malos momentos y disfrutando en los buenos. Por eso, no podía resistir la situación. Con Claudio Giráldez volvió a ser el capitán que es, al menos durante el partido de ayer, y fue el director del juego ofensivo del Celta. Es un 10 con creces. Su asistencia para el gol del empate no fue difícil, más lo fue el golazo de Carles Pérez, pero su ambición fue transmitida al resto de jugadores, que se vieron alentados para conseguir la remontada. 

Victoria muy importante para el conjunto vigués, que lo aleja algo más de la zona infernal y, sobre todo, ha encontrado buenas sensaciones.

Iago Aspas es perseguido por Nemanja Gudelj | Fuente: Getty Images
Iago Aspas es perseguido por Nemanja Gudelj | Fuente: Getty Images