(2) Vegas Golden Knights 5-1 Colorado Avalanche (2)

Los Vegas Golden Knights están de regreso y más vivos que nunca en los NHL Playoffs. El equipo de DeBoer apaleó 5-1 al Avalanche para empatar la serie a dos. Vegas ha sido el mejor equipo en la serie desde el segundo periodo del Game 2. Colorado está teniendo muchos problemas para poder hacer algo ante los defensas de Vegas (Theodore y Pietrangelo), una vez que van al ataque. Además Jonathan Marchessault tuvo tres goles en su noche y Vegas ha mejorado su contundencia. 

 DeBoer ha sabido neutralizar a la línea de MacKinnon con su primera línea. Chandler Stephenson no sólo aporta con su velocidad pero también defendiendo. Colorado está sufriendo mucho sacando el puck  y no enlaza bien a la zona neutral. Vegas ha ganado las batallas en las bardas, en odd man rushes y en hits. En el partido 4, la diferencia fue que por fin Vegas ha encontrado la pegada con sus goleadores. En la serie contra los Wild tenían muchas llegadas pero pocos goles. Pacioretty y Marchessault aportaron los goles. 

 Colorado tuvo un poco más de propuesta en el partido 4 que en los pasados, pero no fue suficiente para vencer a Marc-André Fleury. La llamada Fortress fue una caldera y el público en T-Mobile Arena también jugó su partido. La segunda línea tuvo los goles de Marchessault, pero también el aporte de Reilly Smith y William Karlsson. Karlsson no sólo aporta goles pero también asistencias. Karlsson tuvo tres asistencias clave en el partido. 

Vegas reaccionó bien al tempranero gol de Saad e impuso sus condiciones 

 Los Golden Knights salieron con todo desde el primer periodo y tuvieron tres ocasiones claras en transición. De cualquier manera, el Avalanche fue el que abrió primero el marcador con un gol de Brandon Saad. En un buen dump del puck, Rantanen pasó a Compher entrando a la ranura para un slap shot. El rebote en el crease le quedó a Saad para un fácil gol. Fleury no pudo enfriar el puck y eso fue la clave del gol del ex Blackhawk. 

 Vegas no resintió el golpe de encajar un gol tempranero y siguió con su buena inercia de juego. Los Golden Knights empataron de inmediato en un scramble en el crease. La clave fue como William Karlsson pudo recuperar el puck pegado a la barda en un gran forecheck. Karlsson puso un pase cruzado a Marchessault que apenas tocó el puck para meterlo a la red. El goalie Grubauer quedó mas colocado por las jugadas previas. Vegas superó 15-9 al Avalanche en tiros en el primer periodo. 

 En el segundo periodo, los odd man rushes liquidaron a la defensa del Avalanche 

 Max Pacioretty se había perdido varios partidos de estos playoff, pero tenerlo sano es clave por su capacidad goleadora. Colorado tuvo un faceoff al comienzo del segundo periodo en zona de los Knights. De allí Vegas recuperó el pulso y en un odd man rush se puso arriba 2-1 Zack Whitecloud es un gran defensa pero también ayuda en ataque. Entre él y Stone armaron el gol para el slap shot de Pacioretty en el círculo de faceoff. 

 La frustración de Colorado se reflejó en una tonta penalidad de Burakovsky al agarrar por el cuello a un defensa de los Golden Knights. Una jugada intrascendente. De ese power play cayó el 3-1 con un slap de Marchessault al palo lejano y al ángulo de la portería de Grubauer. El tiro de Marchessault fue desde el círculo de faceoff y con una buena visión de Pietrangelo para encontrar sólo a Jonathan para el disparo. 

 En el tercer periodo, Colorado intentó meterse al partido con buenos shifts y presión sobre la portería de Fleury. Vegas esperó liquidar al contragolpe y lo hizo con buen forecheck en el trapecio de Reilly Smith y pase al slot bajo a Marchessault que así tuvo su hat trick. Ya con el 4-1 el partido fue un trámite en el 3er periodo. Al final los Golden Knights acabaron 35 tiros a gol por 18 de los visitantes (5-1 final con un gol en un rush de Brown). 

 Los siguientes dos partidos serán en casa del Avalanche, pero con serias dudas sobre como frenar la inercia de Vegas. El ganador de la serie seguramente irá contra los Montreal Canadiens en una de las semifinales. La serie tan esperada entre dos candidatos a la Stanley Cup ha sido eléctrica y no ha decepcionado en lo absoluto.