El centro Tatsumi vuelve a ser testigo de una jugada maestra por parte de la selección masculina de waterpolo, que se clasifica para las semifinales en estos Juegos Olímpicos de Tokio 2020, tras unos 20 años en los que España no ha optado a ni una sola medalla olímpica en waterpolo. Un doblete en semifinales tras la victoria de la selección femenina contra China.

Cinco partidos fáciles para los españoles, cinco victorias y ni una sola derrota en su historial olímpico. Nuestros jugadores han tenido una buena racha hasta toparse con los estadounidenses, no se lo han puesto fácil en este partido tan apretado, una preparación más que necesaria para no bajar la guardia contra el próximo contrincante que será un hueso duro de roer, Serbia.

Pese a un buen inicio para los de David Martín con un 3-1 bastante relajado, los siguientes cuartos no han sido ni parecidos, la tensión con la que se han jugado el pase a esta semifinal se ha visto en ese 6-6. A pesar de que la selección de EEUU no son potencia en esta clase de juegos y modalidades, muy a diferencia de las otras clases de deportes, han dado juego a los nuestros.

Hannes Daube fue la estrella de esta jornada, el que más dolores de cabeza ha traído a casa y más duro ha intentado pelear; no obstante, Daniel López-Pinedo volvía a estar dispuesto a parar todas y cada una de las ofensas con un 60% de aciertos.

Y no todos los países tienen un López-Pinedo, pero Alex Wolf ha frenado más de un punto en el marcador español, todos los lanzamientos de Álvaro Granados y Alberto Munárriz eran parados por este. El esfuerzo y la determinación con la que contamos en estos JJOO no tiene rival, y eso es lo que se verá contra los serbios el próximo viernes 6 de agosto.

 

 

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