La cirugía a la que se ha sometido Jack Eichel para sustituir el el disco cervical que le estaba provocando intensos dolores ha sido satisfactoria según informa el periodista Jeff Marek del canal deportivo canadiense Sportsnet tras su conversación con el cirujano responsable, el doctor Chad Prusmack.

La operación se llevó a cabo el pasado viernes en Denver, en concreto en el Rocky Mountain Spine Clinic, que como su propio nombre indica es un centro especializado en el tratamiento de afecciones de la columna vertebral.

Un proceso quirúrgico largamente esperado por el jugador, vio como este no era autorizado por su anterior equipo, los Buffalo Sabres. Este desacuerdo en como llevar la lesión, desembocó en la pérdida de la capitanía y posterior traspaso a los Vegas Golden Knights que decidieron apostar por la postura del jugador y su posterior recuperación.

Una recuperación activa

El delantero aún permanecerá tres semanas en Denver donde iniciará su recuperación, para después completar los tres meses de recuperación en Las Vegas.

Un disco intervertebral desgastado es fuente de intensos dolores, y aunque hay tratamientos conservadores, si estos no son efectivos, la sustitución de dicho disco por uno artificial es el proceso a seguir.

Esta cirugía es un proceso rutinario para la ciencia médica hoy día, de corriente tiene una duración entre las dos y tres horas, y tras su finalización supone la continuación de la hospitalización por uno a tres días que dependerá del dolor y de cuando se recupera la movilidad.

Lejos del reposo, Eichel deberá emprender en seguida actividad física moderada, ya que dicha actividad siempre que no suponga hiperextensiones de la columna favorecerá su recuperación, un proceso que el jugador como principal interesado, y los Golden Knights como beneficiarios en el hielo de la misma, empieza con buen pie. Y es que si ya de por si, los de Nevada son uno de los favoritos para la Stanley Cup con el refuerzo de un recuperado Eichel para los playoff, refuerzan dicha candidatura.