Desde que Michelin entrase en el Mundial hasta ahora, la marca de neumáticos ha permitido a los equipos y pilotos trabajar cada fin de semana en mejorar sus condiciones con respecto a sus correspondientes adversarios.

Ante el comienzo de una nueva temporada, Piero Taramasso, director de Michelin MotoGP, ha querido describir cuáles son sus planes este año: “Trabajamos cada temporada en los neumáticos para mejorarlo. Cambiamos un poco para esta temporada nuevamente, es muy pequeño el ajuste de comparación para los diferentes “race tracker” y el objetivo era darle un tipo más consistente al piloto. Más consistente, más rápido en tiempos, pero para todas las carreras más largas

Como el propio Taramasso cuenta, el principal objetivo de la empresa francesa es ayudar a los equipos del Mundial en su rendimiento cada Gran Premio. Es por ello, que han decidido eliminar el compuesto más blando probado en las pasadas temporadas, ya que los propios pilotos sentían que era “una elección muy agresiva” y trabajando en los otros modelos existentes para mejorar aún más.

Entre las mejoras, cuenta Taramasso, la búsqueda de grip ha sido una de las claves de los cambios en esta nueva temporada: “Hemos trabajado en el grip, también en la estabilidad”. Y sobre todo, teniendo en cuenta las temperaturas de la pista, que como pudimos comprobar el año pasado con el comienzo de la temporada en pleno Julio, fueron un factor clave de cara a la elección de neumáticos.

En cuanto a la temporada 2021, cuenta que no se producirán cambios mayores: será la misma combinación que hasta ahora hemos estado viendo. Es decir, cada piloto contará con 22 neumáticos para cada Gran Premio. 10 delanteros y 12 traseros, diferenciando entre neumáticos blando, medio y duro.