Un partidazo de potencia y pura explosión durante 2 horas y 11 minutos en pista central. Repertorio de tenis variado, ocho roturas de servicios en total, cuatro por lado. Con el dramatismo y los nervios instalados de principio a fin. Cada jugadora tuvo lo suyo, una mezcla de experiencia y juventud. Tremendos gritos en el festejo de cada punto y de ambos bandos. La estadounidense Serena Williams (WTA 11) ganó peleando y sufriendo, en tres sets por 6-4 2-6 6-4 a la bielorrusa Aryna Sabalenka, séptima cabeza de serie.
Williams está en los cuartos de final del Abierto de Australia, incluso a pesar de haber caído al suelo y doblarse el tobillo en el segundo set. Se cruzará por el pase a la semifinal con la estelar rumana Simona Halep, número dos del mundo, quien se vengó de la polaca Iga Swiątek con un triunfo por 3-6 6-1 6-4.
Siempre hay una primera vez. Williams, de 39 años, y Sabalenca, de 22, nunca habían jugado antes. La bielorrusa tuvo la capacidad de igualar el poder de la adversaria desde la línea de fondo, sin embargo, no pudo arrasar con la mayor experiencia de la estadounidense.
Serena se llevó el primer set 6-4 con el primer break del partido en el décimo juego. Sabalenka, devorada por los nervios, arrojó al suelo violentamente su raqueta.
Al principio del segundo set, Williams cayó al suelo, el tobillo derecho fuertemente vendado se torció, el cuerpo se contorneó y la raqueta salió despedida.
La ganadora de 23 Grand Slam indicó con la mano que estaba bien, se levantó para volver a atarse el zapato derecho. Le tomó tiempo recuperar el control.
Sabalenka, animada y contundente, rompió el servicio de Williams tres veces en el segundo set, hasta ganar 6-2.
En la tercera y última manga, Williams tuvo ventaja de 4-1, con un quiebre del servicio y hasta ahí había controlado a la potente rival, que enfrente daba batalla hasta igualar 4-4. La ex número uno del mundo rompió el servicio de su oponente y ganó los dos últimos juegos para mantener la ilusión de ampliar el récord con la obtención de su título 24 de Grand Slam.
Nunca fue fácil
Hablando después de su victoria, Williams dijo que “estoy feliz de superarlo. No fue fácil y sabía que no iba a ser fácil. Ella estaba dando el primer golpe en cada golpe. Incluso, los juegos que perdí fueron muy igualados, un tiro aquí y otro allá, y sentí como, 'Serena, tienes esto, tienes que seguir adelante”.
