La Asociación de Tenis de Estados Unidos anunció que todas las entradas para las canchas y pases de campo saldrán a la venta en julio. El último torneo de Grand Slam del año está programado para celebrarse en Flushing Meadows en Nueva York del 30 de agosto al 12 de setiembre.

La decisión de la USTA de regresar a su número habitual de personas en el lugar es el último paso en el regreso a la normalidad para Nueva York — y para los fanáticos de varios deportes — mientras el mundo emerge de más de un año de restricciones.

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, dijo que muchas de las reglas restantes de distanciamiento social del estado se suavizarían porque el 70% de sus adultos han recibido al menos una dosis de una vacuna contra el coronavirus.

Para el tenis, el US Open será el primer torneo de Grand Slam en tener una asistencia completa desde el Abierto de Australia en enero-febrero de 2020, poco antes que el brote de coronavirus se convirtiera en una pandemia.

La USTA celebró el US Open 2020 sin espectadores, lo que alteró la atmósfera y las condiciones en un evento, donde las multitudes son parte del escenario, especialmente durante las sesiones nocturnas en el Arthur Ashe Stadium con 23.771 asientos.

Retorno gradual


El Abierto de Francia recientemente concluido permitió que más de 5,000 espectadores ingresaran a los terrenos de Roland Garros a diario durante la semana 1, y eso aumentó a más de 13.000 personas al final. El estadio principal, Court Philippe Chatrier, estaba limitado a 5.000 fanáticos, aproximadamente un tercio de su capacidad, para las finales individuales el fin de semana pasado.

El All England Club y el gobierno británico anunciaron esta semana que la cancha central estaría llena al 50% de su capacidad cuando Wimbledon comience el 28 de junio, y que aumentará al 100% para las finales individuales femeninas y masculinas del fin de semana de cierre, del 10 al 11 de julio. Wimbledon se canceló en 2020 debido a la pandemia, la primera vez desde 1945 que no se celebró dicho torneo.

Últimos campeones

El año pasado, la japonesa Naomi Osaka ganó el US Open por segunda vez tras vencer a la bielorrusa Victoria Azarenka por 1-6 6-3 6-3. En la final individual masculina, se impuso el austriaco Dominic Thiem, quien logró una remontada épica ante al alemán Alexander Zverev, y estrenó su palmarés de 'Grand Slam' con un resultado 2-6 4-6 6-4 6-3 y 7-6 (6), en poco más de cuatro horas. Aquel torneo no contó con el español Rafael Nadal y el suizo Roger Federer, en tanto el serbio Novak Djokovic fue descalificado por acertar accidentalmente con un pelotazo a una juez de línea.