La Real Sociedad B ha vuelto a Segunda División por la puerta grande. 59 años después del último ascenso, a la categoría de plata, del filial "txuri-urdin", los jóvenes jugadores del Sanse volvieron a lograr la hazaña la temporada pasada. Liderados por un gran Xabi Alonso, realizaron una inmejorable campaña liderando la clasificación. 

Tras unas merecidas vacaciones, los potrillos volvieron a ponerse manos a la obra en Zubieta nuevamente dirigidos por el tolosarra. El club hizo oficial la baja de hasta seis jugadores: Unai Ruiz-Zeberio, Álex Petxarromán, Imanol Galarreta, Aitor Aranzabe, Unai Veiga y Ekaitz Jiménez. Al mismo tiempo que se fueron cerrando las incorporaciones de Peter Pokorny, Cristo Romero y Germán Valera, junto a la subida de Karrikaburu del "C" y las bajadas de Roberto López y Luca Sangalli del primer equipo.

Estreno de ensueño en casa

Llegó el primer encuentro y que mejor escenario que el Reale Arena para una plantilla que seguro que ha soñado con defender los colores en el fortín donostiarra. Ante ellos uno de los rivales más difíciles de la categoría, el Leganés. Un conjunto con grandes nombres en su plantilla, empezando por el míster Asier Garitano, pasando por el guardameta Asier Riesgo y sin olvidar el delantero Sabín Merino entre otros.

A favor de los de Xabi Alonso, además de la ilusión del debut, 3000 voces, con mono de fútbol en directo, repartidas por la grada dispuestas a llevar en volandas a los suyos. El míster sorprendió con su once inicial. Por una parte al dejar en el banquillo jugadores "veteranos" como Sangalli, Sola o Roberto López. Y por otra al alinear a las tres nuevas incorporaciones, Valera, Cristo y Pokorny. Los locales saltaron al terreno de juego a por todas y no se amedrentaron ni ante la categoría ni ante el rival.

Algunos jugadores del primer equipo no se perdieron el debut // Foto: <b><a href='https://vavel.com/es/data/real-sociedad'>Real Sociedad</a></b>.
Algunos jugadores del primer equipo no se perdieron el debut // Foto: Real Sociedad.

Primera mitad de tanteos

Pitido inicial y Valera y Karrikaburu dieron los primeros susto a los pepineros al poco de comenzar el choque. El alto nivel rival se notó inmediatamente con dos grandes disparos de Naim a los que estuvo muy atento el guardameta Zubiaurre. Tras el arreón inicial, el duelo se igualó con algunos tramos de clara posesión visitante, pero con resistencia defensiva local.

Al filo de la primera mitad, el Sanse dispuso de una triple ocasión. Primero Garrido remató por encima del larguero, después un disparo de Nais no generó peligro al no tener potencia y por último Karrikaburu lo volvió a intentar con un cabezazo directamente fuera.

Segunda mitad con color "txuri-urdin"

Tras el descanso, los potrillos de Xabi, salieron aún más enchufados en el partido y liberados de la presión del debut, sacaron a relucir ese juego vistoso que tanto gusta y que tantos alegrías les dio el año pasado. La Real se hizo con el control de la pelota. Karrikaburu tuvo la primera ocasión de peligro, pero su remate no vio portería. Cerca de cumplirse la hora de partido, Arambarri se adentró en campo rival al mismo tiempo que Cristo le indicó con el brazo su desmarque. El central lo vio a la perfección y coló un pase milimétrico entre líneas para el lateral. Cristo llegó como un obús hasta línea de fondo y asistió a un Karrikaburu situado en el punto de penalti. El 9 sacó su vena de "killer" para controlar de espaldas a la portería y, tras un giro magistral sobre sí mismo, perforó el arco de Asier Riesgo.

Los pepineros quisieron sobreponerse y cerca estuvieron de hacerlo gracias un peligroso disparo de Naim, pero Zubiaurre estuvo muy atento para repelerlo y mantener la ventaja. Un intento de reacción que se quedó en espejismo porque el dominio siguió siendo local. Ambos entrenadores movieron el banquillo dando entrada a jugadores de refresco. Fue precisamente Javi Martón, sustituto del goleador, quien tuvo en su cabeza el dos a cero. Riesgo nuevamente estuvo imperial estirándose abajo. En el tramo final, el Leganés buscó desesperadamente el empate, pero la Real aguantó de manera sobresaliente. El colegiado pitó el final y la fiesta se apoderó del Real Arena, tanto en las gradas como en el césped. Tres puntos de oro para entrar por la puerta grande en LaLiga Smartbank. Siguiente rival a batir, el Lugo, el próximo sábado a las 17 horas.

Karrikaburu y compañia celebran el gol // Foto: Real Sociedad.
Karrikaburu y compañia celebran el gol // Foto: Real Sociedad.

Debuts prometedores y grandes regresos 

Xabi Alonso dio la oportunidad de salir desde el inicio a las tres nuevas incorporaciones del Sanse, Valera, Cristo y Pokorny. Una gran responsabilidad a la cual los tres estuvieron a la altura dejando destellos de calidad y de entrega. El lateral izquierdo Cristo se incorporó al ataque en numerosas ocasiones y en cada subida aprovechó para colgar peligrosos esféricos al área. Precisamente en uno de ellos, conectó con Karrikaburu y llegó el tanto de la victoria. Valera ocupó la posición de extremo izquierdo y fue una amenaza constante cada vez que el balón llegaba a sus pies. Demostración de desborde, velocidad, buenas asociaciones con sus compañeros. Los rivales tuvieron que recurrir a las faltas para frenarle. Por último, Pokorny, no se quedó atrás y destacó en el centro del campo pendiente en todo momento del juego, generoso en las ayudas y atrevido en la presión. Formó un dúo de gran nivel junto a Garrido.

Un buen comienzo para las tres novedades que sin duda ilusionan a la afición. Una ilusión incrementada cuando Luca Sangalli, fuera de los terrenos desde, en partido oficial, desde el 10 de marzo de 2020. Con una sonora ovación se lo hizo saber las más de 3000 personas que ocuparon la grada del Reale Arena.