El Deportivo cosechó una nueva victoria en la vigésimo quinta jornada liguera, alarga su racha una semana más, son ya seis triunfos consecutivos y ocho en las últimas nueve jornadas. Es de largo el mejor equipo de todo el fútbol nacional. El inesperado pinchazo del Nastic ante el colista de la categoría, hace que los herculinos los superen en la clasificación. Son ya segundos y únicamente un punto les separa del nuevo líder de la clasificación, la Ponferradina.
El cuadro coruñés volvió a dar una inmejorable imagen en su duelo frente al filial de Osasuna. El equipo volvió a salir muy enchufado, desde el primer minuto se le vio con intensidad y la determinación de salir a por la victoria. Jugadores que están en el mejor momento de la temporada, como Lucas Pérez que vuelve a ser un futbolista diferencial. La recuperación de Barbero también ha sido fundamental.
La solvencia con la que consiguen victorias en las últimas semanas ha disparado la ilusión en la afición deportivista. Sin embargo, desde todas las instancias del club no lanzan las campanas al vuelo, se pide prudencia, en especial, Imanol Idiakez insiste en no pensar más allá del próximo rival. Lo importante y esencial es lo inmediato, el hoy. Continuando con esta actitud, los resultados llegarán.
Quizás el mayor riesgo que tiene actualmente el Deportivo es perder esta mentalidad, esta convicción del partido a partido que tan buen resultado le está dando hasta el momento. No es descabellado decir que el principal rival del Deportivo es el propio Deportivo.
Este domingo el cuadro herculino vuelve a Riazor, el rival será el Lugo en un choque que comenzará a las 18:00 horas. Se prevé un extraordinario ambiente en el estadio coruñés, donde previsiblemente se colgará el cartel de "no hay billetes". Lograr una victoria sería un paso enorme, no solo por alargar una semana más la racha, sino por dar otra nueva inyección de moral y confianza al equipo.