El problema entre Daniel Ramírez y Ángel González sigue abierto. La audiencia que se celebraría en el Comité de Apelación y Arbitraje del Deporte (CAAD) quedó en paréntesis al no presentarse el canterano universitario a la cita. Mientras tanto el llamado “Coca” sigue buscando que Ramírez pueda resarcir el error de sus declaraciones al programa ESPN RadioFormula.

El visor de talentos declaró después de la audiencia: "Se quedó en términos de que vamos a conciliar con él, no se presentó y se hará otra audiencia el 3 de julio. No hay ningún acuerdo". Ramírez dio a entender que González le pidió la suma de diez mil pesos para poder seguir entrenando con los Tuzos del Pachuca y por ello dejo al equipo.

González agregó: "Buscamos conciliar, ya hay una propuesta de cuatro puntos. Que por medio de la prensa me deslinde de lo que dijo, una disculpa pública porque mi imagen está muy manchada, no es justificable que una carrera de muchos años se manche así. Una indemnización el abogado lo verá, claro que sí cabe la posibilidad". “Coca” fue despedido por el Club Pachuca después de lo sucedido y reinstalado en su puesto cuando el jugador y Mario Trejo aclararón lo sucedido en rueda de prensa.

Para acabar sus declaraciones, González aclaró que no quiere perjudicar a la FMF: "Eso no, es cuestión del CAAD. Él tiene que remediar el daño que hizo. Quiero aclarar que yo no tengo nada en contra de la Federación Mexicana de Futbol, ahora mandaron una persona".

Mientras tanto Hortensia Bravo, madre de Cuauhtémoc Blanco quien fuera descubierto por el “Coca”, reaccionó en contra del atacante universitario: "Yo vengo a apoyar al señor Ángel porque no sé por qué este niño lo dijo, porque para mí el 'Coca' es una persona intachable, a mi hijo jamás le pidió un peso para tenerlo en el América. A este chamaco que Dios lo perdone, y como dice mi hijo, al que obra mal, mal le va. Está muy enojado porque 'Coca' ayuda a los muchachos de bajos recursos y lo digo con la frente en alto.  Lo apoyo hasta la muerte", concluyó.