Hablar de la historia actual de la Sociedad Deportiva Leioa es hablar de David Movilla. El idilio entre el histórico club vizcaíno y el técnico, exportero en la cantera del Athletic, parece sacado de un cuento de fantasía. Firmó hace nueve años cuando el equipo estaba en División de Honor del fútbol regional y esta temporada lo ha hecho debutar en la Segunda División B.

Movilla nació en Barakaldo hace 34 años y sus últimos nueve años los ha pasado en el club azulgrana. Ser entrenador es una vocación gestada en su niñez y pronto decidió que su futuro pasaba por el banquillo y no bajo palos. Con 23 años ya entrenaba al Arenas en Tercera División y con 26 sacó el tercer nivel de entrenador.

Tras estrenarse en Segunda B en agosto a sus 89 años de historia, el Leioa es séptimo con 21 puntos en el Grupo II y lleva tres jornadas consecutivas a golpe de victoria. Tras la última, el pasado sábado contra el Real Unión, David Movilla fue elegido el mejor 'director' de la jornada

Cuando repasa su carrera, habla de su equipo, de la liga, de la Copa y, en definitiva, de fútbol, los minutos corren tras el balón de la pasión. Aquella pasión que le hizo dejar su trabajo para dedicarse a su vocación, ser entrenador.

PREGUNTA. Primero de todo, fue elegido el mejor entrenador de la jornada 13 en VAVEL.com de entre 80 entrenadores. ¿Cómo lo valora?

RESPUESTA. Bueno, bien. Yo soy de los que dan relevancia a los premios en mayo. De nada sirve aglutinar ahora la atención de los medios por hacer bien las cosas si luego no le damos una continuidad.

Evidentemente uno se alegra de este tipo de cosas porque son bienvenidas, pero a mí lo que me importa es conseguir el objetivo a final de temporada y ahí es donde todos los parabienes serán bienvenidos.

P. Dicen que desde muy joven quiso ser entrenador. ¿Cómo se gestó esa afición por ser entrenador antes que jugador?

R. Es algo vocacional. Yo desde los 13 años, recuerdo que era algo que me atraía, que me gustaba y que la práctica del fútbol, aparte de para disfrutar y para competir, la tenía orientada para aprender de los entrenadores que tenía.

Era algo tan vocacional y que me atraía tanto que ya con 16 ó 17 años me estaba viniendo a la mente abandonar la práctica. Eran mis últimos 3 años en Lezama, en cadetes y juveniles del Athletic. Luego con el Romo juvenil, Arenas de Tercera y ya mi último año de juvenil tomé la decisión de al año siguiente empezar con la práctica de entrenador. Quería probar.

Es algo que me ha atraído desde el principio. El análisis del juego, la organización de los equipos y mil pequeños detalles. En los descansos, aunque no estuviera jugando de titular, me gustaba entrar al vestuario para saber cómo manejaba el entrenador de turno el partido.

En los partidos de la televisión buscaba un análisis táctico, una comprensión del juego y es algo que siempre me ha llamado y tenía claro desde el principio.

P. Dicen que era un gran portero y que hizo una pretemporada con el Sestao River.

R. Sí. Mi primer año de senior yo acabo jugando en el Arenas en Tercera, tengo una oferta para renovar y me llama Zurimendi para ir al Sestao. Y decido ir a hacer la pretemporada.

Al final me iba a quedar como portero suplente, creo que de Castellanos, con 19 años. Y tomo la decisión de acabar en el Leioa y compaginarlo, entre otros motivos, porque entrenaba ya al Romo y me venía mejor el quedarme en el Leioa jugando, en Regional, y seguir compatibilizándolo con mi cargo de entrenador en el Romo cadete, cosa que entrenando en Sestao iba a tener más complicado. Estuve con ellos un mes o mes y medio.

P. ¿Y cómo ha sido su carrera como entrenador?

R. En el Romo cadete estuve un par de temporadas. Firmé al año siguiente en el Peña Athletic cadete en Preferente y ascendimos a Liga Vasca. Luego me llamó el Arenas para coger el Arenas juvenil “B” -Zugazarte juvenil-, que estaba en Preferente y ascendimos a Liga Vasca.

Al año siguiente cogí el Arenas juvenil “A” en Nacional e íbamos primeros en la jornada 10 aproximadamente y cesaron a Gorka Alkiza en el de Tercera División. Yo tenía 23 años por aquel entonces y apostaron por mí para coger el primer equipo.

Era la jornada 12, el equipo estaba en descenso y acabamos la temporada en décima posición. Al año siguiente, por mi bisoñez, le comenté al presidente que no tenía ningún problema en volver al juvenil, pero insistió en darme el equipo y continuar en Tercera.

Hicimos una temporada entera en la que acabamos en séptima posición y la temporada siguiente la empecé con un objetivo un poco más ambicioso e intentar mejorar esa séptima posición. Y me cesaron con 26 años en la jornada 19, estando quintos o sextos aproximadamente, en una situación en la que tuve mis desavenencias con el presidente desde la pretemporada por la configuración de la plantilla. Había corrido más a cargo de él que al mío, entre otras cosas. Y era una muerte anunciada, digamos.

Fui cesado en enero y estuve hasta junio sin hacer nada. Tuve la llamada del Leioa para cogerlo en Regional. A falta de dos jornadas me comprometí con ellos. Recuerdo que el equipo estaba a punto de descender a Regional Preferente y al final se salvó en el último partido contra el Galdakao aquí -en Sarriena-.

Mi primer año en el Leioa en Regional hicimos una cuarta posición, el segundo año quedamos campeones y ascendimos a Tercera División y luego los dos primeros años salvamos la categoría. El tercer año hicimos un noveno puesto. El cuarto un octavo. El quinto un cuarto puesto y play-off y el sexto en Tercera División, mi octava temporada en el Leioa, quedamos campeones y ascendimos.

P. Entró hace 9 años en el Leioa. ¿Con qué aspiraciones entró y qué aspiraciones tiene hoy en día?

R. Cuando llegué al Leioa quería resarcirme, porque para mí fue, con 26 años, un palo duro ser destituido y no por una situación clasificatoria. Quería empaparme del fútbol de Regional y el club y yo nos marcamos como objetivo de en cuatro años subir a Tercera División.

Lo conseguimos en dos temporadas. Según ascendimos nos marcamos el objetivo de asentar el equipo en la categoría. Lo hicimos en dos años y luego quisimos jugar dos play-off de ascenso en cuatro años. Lo conseguimos. En el segundo ascendimos y ahora el objetivo a corto plazo es asentar el club en la categoría, bien conmigo o sin mí.

Siempre he pensado en el club, mi objetivo ha sido que el club crezca y mi aspiración personal se basa en mejorar como entrenador e intentar ir de la mano con el Leioa. Que me da los medios para mejorar como entrenador.

P. La temporada pasada dijo que quería dar el salto a Segunda B. ¿En ese momento pensaba que podría hacerlo con el Leioa?

R. Bueno, ha salido alguna declaración mía… Yo aspiro como entrenador a crecer, pero yo a lo que aspiro es crecer allá donde considero que están los medios para que haya un proyecto serio.

Hace cuatro o cinco temporadas tuve una opción en Segunda B que no fue muy clara. No la vi muy clara. Y no tengo prisa. Tengo 34 años actualmente y no tengo prisa y no tenía prisa. Pero sí aspiraba a entrenar en Segunda B con el Leioa porque este club tiene la capacidad para asentarse en la categoría.

Entonces, entiendo que hay que quemar unas etapas y el club las está quemando como las estoy quemando yo. Estoy ahora mismo conociendo en profundidad el grupo II de Segunda B, del que ya tenía cierto conocimiento, y ahora de lo que se trata es de asentarnos, tanto el club como yo en una categoría nueva para nosotros e ir creciendo.

P. Al hilo, ¿tuvo la posibilidad de irse a un club, a priori, mayor que el Leioa la temporada pasada?

R. No me gusta alimentar especulaciones porque al final he tomado la decisión de seguir aquí y el decir que he podido rechazar… Parece que estás dejando en mal lugar… (su discurso toma otro camino).

"Durante la temporada pasada hubo más llamadas"Durante la temporada pasada hubo más llamadas, más cosas que en temporadas anteriores, pero lo que he tenido claro es que si el Leioa sentaba unas bases para seguir funcionando en la misma dinámica que en los 8 años anteriores, entendía que en el Leioa yo podía seguir evolucionando como entrenador.

Yo doy valor al proceso. No me dejo llevar por cantos de sirena. Es decir, tengo que quemar etapas y creo que el Leioa, ahora mismo, es el club idóneo para seguir ejerciendo y formándome como entrenador e intentar seguir creciendo de la mano.

Hace 9 años, el presidente anterior, Jose Ángel Basauri me dijo cuándo pensaba que iba a acabar mi ciclo aquí y yo siempre le dije que mientras viera que el Leioa podía seguir creciendo yo seguiría aquí. Porque puedo seguir creciendo en el Leioa. El club confía en mí y yo confío en el club.

P. ¿Cuántas hora pasa en el club trabajando?

R. En temporadas anteriores la media era 15 ó 16 horas diarias, más fines de semana y visualización de partidos, porque yo tenía otro tipo de responsabilidades dentro del club aparte del primer equipo.

Este año, con la nueva directiva, ese tipo de responsabilidades cada vez se están reduciendo más y ahora me estoy centrando, casi exclusivamente, en el primer equipo. Entonces me demanda más el primer equipo que otros aspectos dentro del club.

Aquí he hecho otras funciones propias de un club de Regional que no tenía la estructura que ahora mismo tiene el Leioa en Segunda B, ni una junta directiva tan numerosa.

Ahora 12 ó 13 horas diarias son lo habitual de lunes a viernes y luego sábado y domingo todo lo que concierne al primer equipo, más viajar a partidos in situ, ver rivales, etcétera.

P. En ese sentido, ¿analiza mucho a los rivales?

R. Creo que entra dentro de mi labor. Yo creo que esto es un deporte de equipo en que te enfrentas a otro tipo de adversidades. Esto no es atletismo que sabes que si 100 metros los haces en ocho segundos vas a ganar.

Esto es contra quién te enfrentas, qué virtudes tiene, qué carencias tiene. Entiendo que es importante y entra dentro de mi responsabilidad y mi labor dar al jugador la información necesaria para competir e intentar darles las soluciones para que aquellas dificultades que nos va a plantear el rival. También las opciones ofensivas de cara a intentar potenciar aquellos puntos débiles e intentar incidir en ellos. Entiendo que es importante y entra dentro de mis funciones como entrenador.

P. ¿Cómo tiene acceso a la información de otros equipos?

R. Nosotros tenemos dos cámaras con las cuales grabamos todos los partidos nuestros y grabamos partidos de los rivales también. Aparte, ahora en esta categoría tenemos mayor acceso a ciertos medios de comunicación que graban imágenes.

"Me desplazo a todos los campos para ver a los rivales in situ"Pero la grabación de vídeos forma parte de nuestro pan de cada día y el análisis con el vídeo también entra dentro de nuestra responsabilidad. Pero a mí me gusta ver a los rivales in situ. Yo me desplazo a todos los campos para ver a los rivales porque entiendo que hay ciertos aspectos que se cogen mejor viéndolos en directo que no con una grabación.

La grabación es un complemento a ese análisis del rival.

Repaso a la liga

P. Están a dos puntos del líder y siempre ha dicho que el equipo pasaría varias jornadas en descenso. Imagino que no pensaba mucho estar en una posición así en la jornada 13.

R. No, bueno. Yo he dicho que nos tenemos que habituar a estar en puestos de descenso. Y creo que el desarrollo normal de la competición, por el potencial que tienen los equipos, lo normal es que estemos en puestos de descenso varias jornadas.

Ahora mismo la distancia o la clasificación en sí, para mí no es relevante hasta que no estemos a finales de marzo. Hasta entonces entiendo que la clasificación no es relevante porque ahora mismo ganar dos partidos seguidos te pone en una situación clasificatoria que te puede llegar a dar lugar a equívocos y perderlos te puede meter en situaciones de urgencia.

"El objetivo es llegar a los 48 puntos. Nos quedan 27"Nosotros estamos fuera de ese tipo de valoración tanto el cuerpo técnico, como el club como los jugadores. No tenemos en cuenta la clasificación. Yo ahora mismo no sé qué posición ocupa el Leioa ni me preocupa, sino ir sumando puntos y hay una cuestión matemática clara. Con más de 48 puntos sólo se ha promocionado una vez en una de las 76 veces que ha habido esa posibilidad. Estamos hablando de cuatro grupos, 19 temporadas con la puntuación de tres puntos, 76 posibilidades. El objetivo es aproximarnos a esa puntuación. Nos quedan 27. Me trae sin cuidado si ahora estamos en quinta posición o en décima.

Lo importante es sumar puntos. Prefiero tener 24 puntos y estar 15º que tener 21 y no sé en qué posición estamos. Lo tenemos muy claro.

P. ¿Cuál es la clave para hacer de Sarriena un fortín?

R. Aquí no hay claves ni fórmulas mágicas. Aquí entiendo que hay una adaptación muy buena al medio, al campo donde competimos porque entrenamos a diario ahí y eso es importante. Entiendo que estar arropados por nuestra gente, por esa peña ‘Leioa Zaleak’ que nos sigue nos da un plus y entiendo que en casa hemos competido con mucha intensidad y con un ritmo alto de juego en prácticamente todos los partidos. Algo que fuera de casa nos ha costado un poquito más. Pero lo que intentamos hacer en casa lo intentamos hacer fuera.

No cabe duda que en esta categoría todos los equipos están sumando más en casa que fuera. No hay ninguna excepción en ese caso. Sí es cierto que ya llevamos 3 años en los que se nos han escapado pocos puntos, pero somos conscientes de que se nos van a escapar puntos de casa y fuera vamos a tener que sumar por el potencial.

El año pasado sólo nos ganó un equipo y hace dos años también nos ganó un equipo y el Poblense en play-off. En 3 años hemos perdido tres o cuatro partidos. Sí es cierto que el equipo se muestra fiable, pero hay equipos con potencial enorme que tienen que visitar Sarriena que va a ser muy complicado ganarles.

P. Fuera de casa la primera victoria llegó en la última salida. Sí que es cierto que ha habido excepciones como Bilbao Athletic o Castilla tras los que teníais Copa…

R. Sí, es una realidad. De las seis salidas que hemos tenido en competición liguera, hubo dos que fueron previas a esa competición copera y no fuimos con muchos efectivos. Aunque no es justificación. En Lezama y en Madrid no competimos.

Y en las otras cuatro salidas, en tres de ellas nos quedamos en inferioridad numérica muchos minutos. Recuerdo el debut en Fuenlabrada, en el minuto 44 hubo penalti y expulsión, perdimos 1-0. Recuerdo en Lasesarre con empate a uno, nada más empezar la segunda parte nos quedamos con nueve jugadores. Perdimos 4-2, pero estuvimos con nueve jugadores compitiendo hasta el final. De hecho creo que el cuarto gol nos lo meten en el descuento. Y en Las Palmas desde el minuto 20 nos quedamos en inferioridad numérica por un penalti y una expulsión. Estuvimos con diez jugadores 70 minutos y hasta el minuto 65 no nos hicieron el 1-0.

Entonces de esos cuatro partidos en tres hemos estado muchísimos minutos con diez o con nueve jugadores. Y luego el otro partido fue en Tudela en el que competimos en la medida de nuestro nivel.

Pero sí es verdad que hemos estado un poquito lastrados y nosotros no somos un equipo que vayamos a ganar con solvencia ningún partido y tenemos que ir al límite cada vez que tenemos una situación adversa. Aparte de que en el inicio de temporada hemos tenido muchas lesiones, muchas bajas y nos han condicionado un poquito, pero que hemos tenido esas dificultades de jugar muchos minutos en inferioridad numérica.

P. Supongo que al principio de temporada no sabría si les había mirado un tuerto con el tema de las lesiones.

R. Ha sido algo raro, porque yo en los 8 años que llevo aquí, esta temporada hemos multiplicado el número de lesiones que hemos tenido en temporadas anteriores. Es poco habitual. Hemos tenido en los últimos años plantillas cortas. El año pasado desde octubre hasta enero estábamos 16 jugadores en plantilla y no teníamos problemas para hacer la alineación y este año hemos tenido lesiones muy raras desde el inicio de pretemporada. Hasta hace dos o tres semanas no hemos tenido la posibilidad de completar la convocatoria y eso el equipo lo nota. Hemos cogido ya una buena dinámica de entrenamientos, pero sí es cierto que ha sido algo que me ha sorprendido porque no lo había vivido hasta la fecha.

P. Respecto al próximo rival, el Sestao River, ¿qué partido espera, parecido al de Copa o diferente por jugar fuera y otra competición?

R. El River es un equipo que compite tanto en casa como fuera. En casa es más peligroso, porque tiene la ayuda de su público que en los momentos de dificultad le lleva en volandas, pero es un equipo que sobre todo compite muy bien.

"Es difícil salirte del juego que ellos te plantean y llevarles a otro tipo de registro"Tiene futbolistas experimentados, tiene un entrenador que para mí es de lo mejor de la categoría, han hecho yo creo que una plantilla corta, pero con jugadores polivalentes y un nivel competitivo importante y tiene muy definido su juego. Es difícil salirte del juego que ellos te plantean. Es muy difícil llevarles a otro tipo de registro.

Hay equipos a los que les puedes dificultar más ese patrón de juego que tienen, pero el River lo tiene muy definido y es muy difícil de neutralizar. Hay equipos que destacan más por cómo elaboran, por cómo se destacan ciertos futbolistas, pero en este caso el Sestao es un equipo que destaca por su nivel competitivo y por dificultarte mucho la labor. Y luego maneja muy bien las dos áreas. Tanto a nivel ofensivo como a nivel defensivo es un equipo muy bien estructurado, que te mete en su ritmo y en su dinámica de juego y vamos a intentar llevarles a la que a nosotros nos interesa.

Recuerdo copero

P. Fue el primer rival en Copa, ¿cómo recuerda el partido?

R. En Copa creo que fue un partido en el que nosotros lo llevamos al límite en el que la diferencia en el marcador la puso el acierto en las áreas. En una falta con un rebote el balón entró.

Fue una primera parte en la que hubo más ocasiones de las que esperaba. Se impusieron las delanteras. Recuerdo que Iturrioz estuvo a un nivel muy alto y que nos salvó de que el Sestao se adelantara en el marcador. Y a raíz de adelantarnos en la segunda parte administramos bien la ventaja, pero también con la ayuda de nuestro portero.

El Sestao en ese partido si llega a tener más acierto, nos hubiera puesto en más dificultades todavía de las que nos puso, que no fueron pocas.

P. ¿Imaginaban llegar tan lejos en Copa?

R. Queríamos llegar más. La Copa para todos los equipos es una competición diferente, especial, una competición de muchas ilusiones porque te puede poner en un escenario único. Te pone en un escaparte único que no te da la competición liguera.

Son tres partidos a partido único, no a doble partido, y te puede poner en un escenario aún mayor. Entonces nuestra ambición era máxima y afrontamos todas las competiciones como afrontamos la liga.

Fuimos dando pasos. El primer paso fue dificilísimo, eliminar al Sestao. Lo conseguimos. Conseguimos eliminar al Teruel también, que tenía mucha ilusión puesta en esta competición. Recuerdo cuando estuve allí viéndoles que se respiraba un ambiente especial de cara al partido que tenían que jugar aquí. Hicimos valer el factor campo.

Y luego en Cornellà creo que el factor campo fue también determinante, porque hicimos 35 minutos muy buenos. Nos pusimos con ventaja en el marcador, pero luego ese empate justo un minuto antes del descanso nos puso en una situación más complicada y a ellos con la ola a favor. Y fue una lástima porque teníamos muchas ilusiones puestas en esa eliminatoria.

P. ¿Qué hubiera supuesto para el Leioa pasar de ronda?

R. A todos los niveles yo creo que no alcanzamos a ver la repercusión que hubiese tenido. Viendo el sorteo, lo que tocó -al Cornellà le tocó el Real Madrid-, etc. Pero a nivel económico hubiese sido un impulso importante, pero sobre todo hubiera sido el impulso definitivo para que este club se asiente en esa categoría. A nivel de patrocinadores, de masa social, de pueblo, de repercusión, mediático… Una experiencia única para jugadores y cuerpo técnico.

Hubiese sido algo grande, pero yo siempre me tomo este tipo de experiencias como un pasito más para aprender. Yo creo que ese play-off que jugamos hace tres temporadas, que fuimos eliminados contra el Poblense en la primera ronda, fue un pasito más para el año siguiente contra el Varea pasar la eliminatoria.

Yo creo que este club se va nutriendo de experiencias y la Copa es una experiencia más para que en un futuro -esperemos cercano, pero sabemos que es muy difícil volver a tener una oportunidad como esa- para este club jugar la Copa ya no sólo sea jugar la competición, sino sea dar pasos en la Copa. Creo que estaremos mejor preparados si este club llega a tener otra oportunidad igual o parecida.

Evolución azulgrana

P. ¿Cómo ha cambiado el club en estos 9 años desde que se hizo cargo del equipo?

R. Muchísimo, muchísimo. Este edificio –en el que se encuentra la zona de prensa, palco, vestuarios y despachos- no estaba. Recuerdo que para el trabajo de gimnasio teníamos que bajar al polideportivo a hacerlo. Recuerdo que la cámara que manejábamos en Regional apenas tenía nitidez y no podías diferenciar los dorsales. Ahora tenemos cámaras de alta definición, tenemos dos ordenadores potentes para todos los montajes.

Recuerdo que a nivel de entrenamientos teníamos dificultades por el tema ese del gimnasio. Ahora tenemos una bañera para hielos, un vestuario de uso exclusivo para el primer equipo, tenemos más medios para trabajar. El jugador que viene aquí encuentra los medios necesarios para desarrollarse.

Y a nivel social ha crecido muchísimo. Yo recuerdo aquel partido que vi justo cuando firmé aquí, aquel partido de Regional en División de Honor en el que se jugaba el descenso a Preferente había 37 personas en la grada.

Normalmente 300 personas ya tenemos y he visto un play-off aquí con 1.800 personas. Entonces hay una peña que nos sigue. En el pueblo, cuando jugamos en casa, hay bares que ponen la bandera del Leioa. Yo vivo en el pueblo y percibo ilusión.

El club ha crecido mucho. Yo llegué y había 16 equipos en el club. Ahora son 49, integrada la estructura del Leioako Emakumeak -sección femenina-. Ahora hay un director deportivo. Antes el entrenador tenía que hacer de coordinador y de todo. Hay un campus… El club ha crecido mucho a todos los niveles y es una de las bases para poder asentarnos en Segunda B.

Pero la evolución del club ha ido en la misma línea de ha tenido el equipo y puedo decir con orgullo que tenemos a Julio -Montero- que lleva 8 años en el club desde Regional. Tenemos a Oier -Barrado- que está desde esa etapa con nosotros. Tenemos a Mikel Garmendia que estaba jugando en Regional con nosotros y ascendió con nosotros a Tercera. Y hoy 6 ó 7 años después están compitiendo en Segunda B y dando el callo. Entonces ha crecido mucho a todos los niveles.

P. Precisamente iba a preguntar por esa gente como Julio, Oier, Aitor Córdoba. ¿Cómo se están amoldando a la categoría?

R. Muy bien. Está siendo espectacular el crecimiento que está teniendo Aitor Córdoba. Es uno de los futbolistas más inteligentes que he entrenado y con mayor
"Aitor Córdoba es uno de los futbolistas más inteligentes que he entrenado"capacidad de superación. Está a ese nivel de exigencia que le marcas. Ya siendo juvenil de segundo año jugó con nosotros un par de partidos en Tercera, el año pasado siendo juvenil jugó 1.200 minutos y este año lo está jugando prácticamente todo y a un nivel altísimo.

Recuerdo que Oier Barrado el año del ascenso ya hizo pretemporada con nosotros. Acabó jugando en el filial, pero ya estaba en nuestra órbita. Y cada año ha dado el nivel que ha dado el equipo. Los dos primeros años en Tercera daba el nivel para mantenernos. Los dos siguientes subió su nivel. Y los dos últimos ha sido un jugador del primer nivel en Tercera División y ahora en Segunda B está siendo un jugador de Segunda B. Lo mismo pasa con Julio. Se ha ido adecuando a los niveles.

No me quiero olvidar de Ibon Barandiaran, portero que está cedido en la Cultural de Durango, pero también es un chaval de la casa que cada año va quemando etapas y está llamado a ser el portero del Leioa en los próximos años.

Entonces yo creo que es muy importante que esta cantera que tenemos, esos 700 jugadores que de manera paulatina se vayan incorporando. Pero se están adaptando todos y ver jugadores que estaban jugando aquí en Regional hace 7 años y ahora están jugando en Segunda B y dando el nivel es una satisfacción para nosotros.

P. ¿Qué papel desempeña la cantera ahora que están en Segunda B? ¿Quizá pierda protagonismo por el salto que ha dado el Leioa de categoría y al jugador juvenil se le puede hacer más duro el cambio?

R. El salto es muy grande. Y desgraciadamente, entre comillas, ya han debutado cinco jugadores del juvenil en el primer equipo sin estar todavía preparados. Posiblemente a partir de enero o febrero puedan tener mayor nivel competitivo. Han sido las primeras jornadas y hemos echado mano de ellos, como el año pasado lo hicimos de Córdoba, de Guillermo también que debutó con nosotros en Tercera División. Pero es que el salto de un juvenil Nacional al nivel que tiene el Leioa Segunda B es muy alto.

Entonces hay que quemar etapas. Se han dado casos extraordinarios como el de Aitor Córdoba. Ahora, el chaval que se quiere comer el campo ahí lo tiene. Pero es que Córdoba parecía que había pretemporada con nosotros, alternaba juvenil con el primer equipo, pero es que acabó teniendo el mismo nivel que el resto. Por entrenar con el primer equipo y por tener la cabeza muy bien amueblada. Es una esponja a la hora de absorber conocimientos, de aprender de los compañeros y su nivel competitivo está ahí. Yo creo que la Segunda B se le va quedar pequeña dentro de poco.

P. Sorprende que el Leioa no haya tenido ningún cedido del Athletic ¿Cómo son las relaciones con el club?

R. Las relaciones son buenas. Ha habido una serie de malos entendidos que hemos arreglado con ellos. Nosotros sabemos que están a disposición de ayudarnos y ellos saben que nosotros estamos en disposición de facilitarles la labor con aquellos jugadores que han destacado. Como en su día Rubén Susmozas y más casos de jugadores que han estado en su órbita.

Las relaciones son buenas. Somos un club convenido. Aquí todos somos del Leioa y del Athletic. Y sí se ha dado la circunstancia de que este año por una serie de malos entendidos no ha acabado ningún jugador de Lezama en nuestra disciplina. Pero bueno, ya veremos en un futuro si se puede dar esa circunstancia.

P. Como entrenador de un equipo amateur, ¿qué piensa sobre la profesionalización en esta categoría? ¿Es necesario para aspirar a cotas altas?

R. Para nosotros es un hándicap porque es el primer año en Segunda B. Aspiramos cada año a dar pasos. Pero esas seis fichas profesionales a nosotros nos suponen un sobrecoste, como a otros clubes, de Seguridad Social, etcétera, etcétera. Que entiendo que sería lo idóneo, pero que nosotros somos un club que estamos manteniendo un mismo presupuesto que teníamos en Tercera División, pero al cual le tenemos que reducir esa Seguridad Social, esos gastos de desplazamiento añadidos y esos gastos de arbitrajes añadidos. Son casi 70.000 euros menos sumando los tres conceptos en Segunda B que en Tercera División.

"Compaginamos, casi todos, el trabajo y los estudios con el fútbol"Entonces eso nos dificulta. La profesionalización es lo ideal. Hay clubes profesionales, prácticamente todos en esta categoría, que entrenan a la mañana quitando en Bizkaia que exceptuando el Bilbao Athletic y el Barakaldo, tanto Sestao, como Amorebieta y como nosotros somos jugadores amateurs. Compaginamos -habla en general- casi todos, el trabajo y los estudios con el fútbol. Es un problema. Pero entiendo que sería lo ideal tener una plantilla profesional. Ahora, difícil con los recursos económicos que tenemos actualmente.