El “guardametas” de 29 años lleva casi diez años en el club aunque nunca logró tener la continuidad que él deseaba. En su primera etapa en el “Gasolero” (entre 2008 y 2012) acumula siete partidos jugados. En el año 2012 tras no tener continuidad en el club que lo vio nacer decidió irse cedido a Unión de Mar del Plata, donde disputaría quince encuentros. Desde el 2013 hasta el treinta de junio de este año, Leandro De Bórtoli seguirá en busca de esa tan deseada continuidad ya que en este ciclo solo jugó once cotejos.

- ¿Cómo viviste estos años en el club?

- Fueron años muy buenos, pero a la vez muy malos. Fue un recorrido en primera división de casi diez años, tengo grandes recuerdos en cuanto a las actuaciones. El club pasó por varias situaciones límites pero pudimos salir adelante. Pero por sobre todo me voy con la consciencia tranquila porque siempre intenté sumar desde el lado de los más grandes hacia los más chicos. Me voy tranquilo porque dejé todo.

- ¿Cuál crees que fue tu mejor "performance" en Temperley?

- Creo que este último recorrido que fueron los ascensos de Primera B Metropolitana hasta Primera me quedo con el último campeonato de Gustavo Álvarez, porque tuve la posibilidad de jugar esos cinco partidos donde la situación era bastante complicada, futbolísticamente me sentí bien. Creo que como grupo estábamos muy fuertes y creo que era un momento muy difícil porque la permanencia se nos hacia cuesta arriba, pero pudimos lograr el objetivo y mantenernos en primera.

- Institucionalmente hablando, ¿qué cambió desde tu debut en primera con el club hasta hoy?

- Pasamos por momentos muy difíciles, donde la gente o el socio años atrás se tenía que quedar afuera de la cancha, no podía ver a su equipo, creo que esa fue una página muy negra del club y por suerte pudimos reponernos. Hoy por hoy, los hinchas hacen a un costado esos recuerdos y pueden pensar en lo lindo de estos cuatro años y todas las alegrías que vivimos para llegar a primera división. Pero uno no debe olvidar para apreciar donde se encuentra Temperley hoy en día. Más allá de que el descenso sea un sabor amargo, solamente es retroceder un par de casilleros y que todos esos momentos lindos le hacen saber a la gente que nos tiene que seguir apoyando y ojalá que pronto tenga la posibilidad de volver a primera pero todos juntos como siempre pasó en este club.

- ¿Cuál fue el partido que más recordas con la casaca del Cele?

- Son tres los partidos que más me marcaron en el club. Ante Defensores de Belgrano en la Primera B Metropolitana, donde la situación no estaba muy bien, estábamos mirando más la tabla de abajo que la de arriba. En un partido muy complicado y con un rival muy difícil, me toca entrar a los quince minutos con un hombre menos y pudimos ganar el encuentro, creo que ese fue el partido más difícil. Después en cuanto al contexto de jugar en Primera División en la cancha de Racing en la despedida de Milito, jugué por la lesión de Fede (Crivelli), había cerca de sesenta mil personas y era bastante imponente pensar que estábamos con la camiseta de Temperley, club que me vio nacer y llegar a jugar esa instancia creo que fue algo muy lindo y creo que siempre lo voy a recordar. Por último el encuentro que jugamos de local ante Talleres del campeonato pasado que dirigió Gustavo (Álvarez), lo viví de una manera muy emotiva porque era un partido muy complicado donde la permanencia estaba difícil porque los de arriba ganaban y nosotros sumábamos igual, sin embargo se nos hacía muy difícil porque los rivales directos también sumaban. Me quedo también con ese partido que fue muy lindo y también creo que fue bisagra, anímicamente nos sumó muchísimo como para llegar al final del campeonato con chances.

- ¿Sentís que te queda una cuenta pendiente en Temperley o que diste todo?

- Es difícil hablar en cuanto a una cuenta pendiente, en lo grupal me sentí importante y la única mochila que me llevo es no haber logrado un año completo de continuidad, pero a la vez se equilibra un poco la balanza sabiendo que los partidos que me tocó jugar fueron varios con situaciones límites. Futbolísticamente creo que me voy sin deudas, contento por varias actuaciones y desde mi lugar siempre traté de darlo todo.

- ¿Qué le depara el futuro a Leo De Bórtoli? ¿Dónde vas a continuar tu carrera?

- No tengo novedades de nada, todavía tengo contrato con el club hasta el treinta de junio, no nos hemos sentado a conversar acerca de la continuidad ni la rescisión, ni nada. Solamente saber que Gastón (Esmerado) ya me comunicó su punto de vista. Pero en lo personal sé que voy a tener que esperar, se va a venir un mercado de pases muy lento con un Mundial encima y que no juegue la desesperación a la hora de elegir mi destino. Voy por nuevos objetivos.

- ¿Qué mensaje le podés dejar al hincha de Temperley?

- El mensaje que le puedo dar a la gente de Temperley es siempre de agradecimiento, hace muchos años que estoy en el club, sé cómo se maneja la gente y conozco muy bien la institución. Agradecerles, porque siempre apoyaron en todo momento ante cualquier adversidad y ante las máximas alegrías. Quiero recalcar que, para aquel hincha que se suma ahora, en esta nueva etapa, que se contagie del antiguo hincha, que no reproche porque realmente creo que a lo largo de estos cuatro años tanto nosotros, los jugadores, como los dirigentes y también los técnicos que han pasado por este proceso, pusimos al club en un lugar que hace años atrás era impensado. Sabemos muy bien que lo disfrutó porque nos demostraron su apoyo en lo cotidiano como también los fines de semana. Pero por sobre todo quiero que los hinchas disfruten de estos momentos y agradecerles porque Temperley llegó a lo más alto del fútbol de nuestro país, que no es poca cosa, y pese al descenso, que sepan que están todos juntos para poder devolverle ese lugar a la institución que tanto se merece y ha demostrado estar a la altura de jugar en esa categoría.